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96.6 por ciento de los uniformados rechaza ingreso de homosexuales al Ejército

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Además el 66.5 por ciento piensa que la “homosexualidad es incompatible con la disciplina de la carrera militar”, según un estudio del Ejército aplicado a nueve mil funcionarios. El Comandante en Jefe del Ejército, ya inició la modificaciones de instructivos discriminatorios y desde el próximo año se capacitará a los militares de todo el país en la Ley Zamudio.

Interesantes señales está dando el Comandante en Jefe del Ejército, Juan Miguel Fuente-Alba, para enfrentar la discriminación en la rama, luego de que en septiembre pasado se conociera de dos instructivos homofóbicos y, un mes más tarde, el general abordara el tema en una histórica reunión con el Movilh.

Para contribuir a erradicar las discriminaciones, se aplicó una encuesta a nueve mil funcionarios que sirva como diagnóstico. Uno de los temas abordados en las 57 preguntas fue la homosexualidad, quedando, a juicio del Movilh, “en evidencia una cultura institucional homofóbica arraigada”.

De acuerdo a la encuesta, cuyos resultados fueron dados a conocer hoy por La Tercera,  el  96.6 se declara en desacuerdo con el ingreso de homosexuales al Ejército. En tanto, el 52.1 por ciento dice que el “homosexualismo/lesbianismo” “le produce rechazo”, mientras que para el 20.9 por ciento “es un tema indiferente”  y para el 24 por ciento  “una opción personal, que debe respetarse”.

“Considerando la nueva ley antidiscriminación y ante eventual solicitud de ingreso de homosexuales al Ejército”,  el 66.5 consideró que “la homosexualidad es incompatible con la disciplina de la carrera militar”, el 23.3 por ciento piensa que “con la integración de homosexuales se podría poner en riesgo el espíritu del cuerpo”. En tanto, el 8.2 por ciento estimó que “es una situación que va a presentar a mediano o largo y se debe aceptar”, mientras que para el 2.1 por ciento “la condición de homosexual no es impedimento para desarrollar la carrera militar”

Con todo, el 59.8 por ciento  declaró  que en su unidad se siente “respetado, reconocido por sus conocimientos y buenas relaciones”, el 33.2 por ciento “respetado y reconocido por su grado jerárquico”, el  4.3 por ciento “ignorado” y el 2.7 por ciento “discriminado”.

Ley Zamudio

En el marco de esta temática, el Ejército informó que desde el próximo año el Director personal de la Institución, Gerado Stuven, iniciará un recorrido por las unidades del país para orientar en los alcances de la Ley Antidiscriminación, mientras que en los  últimos meses se han revisado 157 textos doctrinarios, con 157 observaciones para adecuar los documentos a la norma.

“En el Ejército no tiene cabida la discriminación de orden arbitrario. En ese sentido he tomado muchas medidas destinadas a garantizar el cumplimiento de todas las normas que garantizan lo anterior, donde la Ley 20.609 (Ley Zamudio) ocupa un lugar muy importante”, dijo Fuente-Alba a La Tercera.

Al respecto el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) valoró las gestiones que está  Fuente-Alba. “Doble es el reconocimiento para el general al considerar que no cuenta con un clima cultural institucional favorable para enfrentar la homofobia. Los polémicos y discriminatorios instructivos conocidos en septiembre pasado sumados a los resultados de las encuestas internas que están aplicando, son una muestra de ello”, dijo la organización.

Los resultados del sondeo, sostuvo el Movilh, “reflejan una cultura homofóbica  institucional arraigada y que, por cierto, ha tenido efectos negativos en la calidad de vida de uniformados que han sido identificados como lesbianas u homosexuales. El caso que estamos llevando de un ex suboficial del norte del país que debió renunciar producto de presiones y humillaciones, es una muestra de ello”.

Añadió que “el Ejército es parte de una sociedad donde el machismo y la discriminación han sido características históricas y que, por cierto, al interior del mundo uniformado, se han replicado con más fuerza por percepciones prejuiciadas sobre lo que es la masculinidad, la feminidad, sobre lo que en síntesis significa ser hombre mujer”.

Redondeó que este contexto “por cierto que los pasos que está dando Fuente-Alba son difíciles, pero sus señales están contribuyendo desde ya a erradicar la discriminación y quizás, en una institución vertical como es el Ejército, los cambios logren ser más rápidos de lo pensado”.

El organismo valoró, por último, que entre los textos que está revisando el Ejército para conocer sobre derechos humanos y minorías sexuales se encuentre “nuestro Manual Educando en la Diversidad, orientación sexual e identidad de género en las Aulas, según nos confidenció el mismo Fuente-Alba en octubre pasado”.

En efecto, los nuevos desafíos que se está plateando el Ejército se suman a la histórica reunión que el pasado 23 de octubre Fuente-Alba sostuvo con el Movih, donde se acordó un enlace permanente entre ambas instancias para enfrentar denuncias por homofobia al interior del Ejército, además de abordarse y analizar justamente ideas para erradicar las discriminaciones.

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