PREPARAN ENCUENTROS LATINOAMERICANOS DE HOMOSEXUALES EN CHILE Y MEXICO

El primero reunirá en Santiago a lesbianas, gays y transgéneros. El segundo tendrá lugar en la Ciudad de México y sólo aglutinará a mujeres. Ambos foros aspiran a mejorar las relaciones entre los grupos de minorías sexuales y luchar en conjunto por sus derechos en la región.

Por G.C y C.H

27 de agosto, 2004 (OpusGay).- Decenas de organizaciones de minorías sexuales de Latinoamérica sueñan desde hace años con generar alianzas que les permitan enfrentar en conjunto los diversos casos de homofobia en la región y avanzar en propuestas para combatir las desigualdades sociales, culturales, políticas y económicas.

Para ello el movimiento homosexual incrementó desde la década los 90 los “encuentros internacionales”. El resultado más concreto de esos cónclaves ha sido débil, pues se ha limitado al “intercambio de experiencias”. Vínculo que, por lo demás, tiende a mermar o desaparecer tras finalizado los foros.

Para este semestre están previstos en la región dos nuevos intentos que buscan superar esos problemas. Uno es promovido por la Asociación Internacional de Gays y Lesbianas de América Latina y el Caribe (ILGA-LAC) y se efectuará entre el 13 y el 17 de septiembre en Santiago. El otro correrá desde el 24 al 28 de noviembre en la Ciudad de México y es organizado por una asociación temporal de lesbianas y feministas.

SIDA, LESBIANAS Y TRANSGENEROS

La secretaría latinoamericana de la ILGA nació con un encuentro celebrado en Lima en 1997, mientras tres años más tarde intentó afianzarse con la ejecución de un segundo foro en Río de Janeiro.

Aunque la ILGA-LAC tiene ocho años y es prácticamente desconocida en este país y el resto de la región, lo cierto es que integran la Asociación decenas de grupos, entre esos los más importantes de Brasil y Argentina, los países que mayores avances han experimentado en beneficio de las minorías sexuales.

Por Chile son parte de la IlGA-LAC el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), el Movimiento Unificado de Minorías Sexuales y el Sindicato de Trabajadores Homosexuales Luis Gauthier.

Tales grupos, junto a Amnistía Internacional, la Coordinadora Universitaria por la Diversidad Sexual, Trabajo y Estudios Lésbicos y TravesChile, aglutinan la Comisión Organizadora de la III Conferencia de la ILGA-LAC que arrancará el 13 de septiembre próximo en la Universidad de Chile.

El secretario regional de la ILGA-LAC, Carlos Cánchez, indica que el fin del cónclave es ” avanzar hacia una nueva etapa de desarrollo de los movimientos homosexuales en América Latina” poniendo especial énfasis en los debates y derechos que involucran a las lesbianas, las transgéneros y las personas viviendo con VIH/SIDA, temáticas prioritarias del Encuentro.

“Los movimientos lésbicos y transgéneros han sido fuertemente castigados por la sociedad, debido al carácter machista y androcéntrico de nuestra cultura. Nuestros movimientos incurrimos en un error enorme al permitir que se invisibilice el desarrollo de las distintas expresiones sociales de la población homosexual “, explica el activista.

En el caso del Sida, agrega, “queremos retomar la lucha desde una perspectiva diferente, menos masculinizada y más integradora. Hasta ahora los principales protagonistas han sido los movimientos gays y se ha excluido arbitrariamente a las lesbianas y mujeres bisexuales por una cuestión de orden estadístico”

Para el presidente del Movilh, Rolando Jiménez, lo importante es que el Encuentro avance en la implementación de estrategias que pasen ” del discurso a la práctica. Los fines son siembre muy buenos y casi siempre compartidos. El desafío es pasar de las ideas a la acción, con compromisos duraderos y tareas claramente definidas para todos los participantes”.

Tras su inauguración el 13 de septiembre, la III Conferencia de la ILGA-LAC partirá con su trabajo un día después en la Universidad Humanismo Cristiano, donde unos 60 representantes de Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Honduras, México, Nicaragua y Venezuela darán a conocer sus particulares realidades.

Junto con elegir a la nueva secretaria regional de la ILGA, los delegados desarrollarán mesas de trabajo donde dialogarán sobre la globalización, los tratados de libre comercio y las violaciones a los derechos humanos de las minorías sexuales.

Pero no todo será trabajo. El programa contempla visitas a sitios históricos de Santiago y Valparaíso como el Cerro San Cristóbal, el Cerro Santa Lucía , el Museo Salvador Allende y, por supuesto, los denominados “barrios gays”, concentrados principalmente en Bellavista.

LESBIANAS UNIDAS

Aunque en la Conferencia de la ILGA-LAC habrá organizaciones lésbicas, lo cierto es que las mujeres homosexuales “se han visto en la necesidad” de crear espacios específicos para debatir sobre sus intereses, al igual como ha ocurrido con las y los trangéneros,

Es en ese espíritu que en noviembre próximo se celebrará en México el “VI Encuentro Lésbico Feminista Latinoamericano y del Caribe”, cónclave ejecutado por “un órgano político temporal” que reúne a organizaciones de mujeres.

El cónclave contempla debates sobre derechos humanos, feminismo, derechos civiles y políticos, familia, amor, maternidad y pareja, además de exposiciones artísticas de fotografía, pintura y escultura, entre otras.

El Encuentro es apoyado, entre otras instancias, por la Comisión Internacional de los Derechos Humanos de Gays y Lesbianas (IGLHRC), organismo que al menos en Chile es más conocido que la ILGA a nivel mediático gracias a trabajos conjuntos efectuados con el Movilh.

La representante para América Latina y el Caribe de la IGLHRC, Alejandra Sardá, enumera diversos razones por las que las mujeres homosexuales desarrollan encuentros exclusivos para ellas.

“Las lesbianas, como mujeres y además como feministas, tienen temas que les son específicos y todo el derecho del mundo de reunirse entre ellas para tratarlos”, dice.

Explica que ” en cualquier foro mixto el número de hombres es siempre dos y tres veces mayor que el de las lesbianas o de personas transgéneros. Los motivos para esto son básicamente económicos: así como en todos los países latinoamericanos los hombres ganan más dinero que las mujeres por hacer el mismo trabajo, las organizaciones de hombres gays (o las mixtas manejadas por hombres) tienen el doble o el triple de dinero que las organizaciones de mujeres y ni hablar que las de personas transgéneros. Además, el machismo sigue siendo una triste realidad en la región”

Con todo, Sardá reconoce que los foros con altas dosis de especialidad son muy necesarios. “sería muy interesante también un encuentro de gays para hablar de masculinidad, por ejemplo. Un movimiento diverso como el nuestro necesita de ambas cosas: de encuentros en los que estemos todos y de encuentros específicos por sectores, sean lesbianas, transgéneros, jóvenes, persona de ascendencia africana, indígenas, deportistas y religiosos”

Sarda puntualizó que en el VI Encuentro Lésbico de América Latina y el Caribe participarán mujeres “representantes de cada uno de los siete grupos de países distintos con quienes estamos haciendo una investigación sobre Lesbianas y Discriminación Laboral. En el foro presentaremos un taller sobre ello.”

En las próximas semanas la Comisión Organizadora del Encuentro Lésbico tendrá listo su programa definitivo y mientras se acerca la fecha de la “gran reunión” las mexicanas continúan con la afinación de detalles no sólo políticos, sino también estéticos. La idea es que todo funcione a la perfección.