Acusan a Iglesia de acto ilegal y homofóbico
31 de diciembre, 2007 (Opusgay.cl).- Una pareja gay fue expulsada violentamente el sábado anterior de la parroquia Santa Elena de La Pintana, dependiente de la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa de la Santísima Virgen María, por el sólo hecho de haberse conocido su orientación sexual.
S.P (17), que había confesado su homosexualidad a la Iglesia cuatro meses atrás, y Patricio C. (21), relataron que el sábado anterior asistieron a la Parroquia invitados por unos padres a la comunión de sus hijos.
En ese momento, el párroco Gabriel dio la orden para que la pareja fuera expulsada del recinto, mientras que una vez conseguido su objetivo un hermano del religioso amenazó a S.P con la frase “cuidate la espaldas”.
“Ni siquiera entramos de la mano, pero él (el cura) le dijo a la monitora que nos sacara. Si hubiera hablado con nosotros nos vamos, pero nos gritó ante toda la gente para humillarnos”, señaló S.P tras presentar una denuncia por amenaza ante la 41 Comisaría de Carabineros.
Al ser consultado por La Cuarta, el religioso reconoció la expulsión, señalando que la pareja se había besado. “No nos incomoda que tenga una inclinación sexual distinta, salvo que se le pidió que fuera cauto y mantuviera esto en privado. (Los chicos) Dijeron que me destruirán. Está enfermo del alma. Esto es prácticamente demoniaco”.
Sin embargo, lo concreto es que la Iglesia intentó someter al S.P a tratamientos psiquiátricos por su orientación sexual, en el marco de servicios psicológicos gratuitos que ofrece a la Iglesia a la comunidad, según se informó a OpusGay.
Por esa razón, el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) expresó ayer su repudio al presidente de la Asociación Parroquial de la Iglesia Ortodoxa, Gabriel Salvador, señalándole que “humillar en público a una pareja homosexual constituye una conducta violenta y promotora del odio, que es desde todo punto de vista incoherente con los valores y principios que vuestra Iglesia dice promover”
“Pero es además un conducta ilegal, pues en nuestra ley la homosexualidad no es un delito, ni tampoco lo es la expresión del afecto entre personas del mismo sexo. Y vuestra Iglesia se rige por los misma Constitución de todos los chilenos. Violentarla es un abuso”, añadió el Movilh.
El organismo indicó además al religioso que “vuestra homofobia pone en peligro la estabilidad psicológica de los jóvenes y ello es reprochable a nivel moral y social, en especial cuando tratan de cambiar una orientación sexual que para la Organización Mundial de la Salud (OMS) no constituye una enfermedad”