ARCHIVOS PERSONALES DE JOSE DONOSO REVELAN SU HOMOSEXUALIDAD

Fueron conocidos en Chile casi 50 años después de ser escritos por el Premio Nacional de Literatura

30 de abril, 2003 (OpusGay).- Casi cinco décadas después de que el Premio Nacional de Literatura, José Donoso, escribiera importantes aspectos sobre su vida privada, sus “archivos personales” comenzaron a ser conocidos en Chile dando cuenta de la homosexualidad de uno de los novelistas nacionales más importantes del siglo XX.

Los denominados Papeles de José Donoso estuvieron hasta este mes recluidos en la Biblioteca Central de la Universidad de Iowa, Estados Unidos, casa de estudios a la que el escritor vendió en miles de dólares colecciones de manuscritos y libros de anotaciones fechados entre 1950 y 1966.

Los archivos fueron conocidos gracias a una publicación del Diario La Tercera, medio que desde este mes iniciará una serie de reportajes basados en los Papeles de José Donoso.

En una de sus confesiones fechada el 11 de febrero de 1957 el autor, que en esos momentos tenía 32 años, señaló que “por fin soy feliz… Siento que mi vida está tomando un verdadero curso, un curso único. Mi amor por José Miguel, que había estado hecho de escombros o de cosas sin construir, enunciadas por la sombra de un mundo naturalmente hostil a tales cosas, (…) ha vuelto, y no me avergüenzo de él, más bien siento que tiene la simplicidad y el abandono de todas estas cosas”.

Agregó que su ternura hacia José Miguel, un hombre 11 años menor que él en ese entonces, es “ infinita. Mi respeto por sus grandes y nobles cualidades de hombre. Mi tremenda, violenta, incontenible admiración por su belleza. Mi asombro ante su purísima juventud. ¿Cómo no amar, cómo no asombrarse? ¿Cómo no desear recibir de un ser así todo lo que sea capaz de dar y, a mi vez, dárselo todo?”.

Cuatro años después de esas declaraciones Donoso se casó, sin embargo, con María Pilar Serrano, mujer con la que escritor experimentó diversos conflictos. “Estoy en pésimo estado. Talvez la úlcera, talvez M. Pilar parlanchina ayer en la mañana es lo que me tiene de pésimo humor y hace imposible concentrarme. De pronto estoy entero dudando de todo -la literatura especialmente. ¿Vale la pena? ¿Es lo que quiero? ¿No es la gran farándula ante mi mismo? ¡What the hell! ¿Y mi matrimonio vale la pena? ¿Quiero a M. Pilar? ¿No es una cárcel para mí? ¿No es ella la que me está destruyendo poco a poco -no soy yo el que la está dejando que me destruya? ¿O me estoy destruyendo yo a través de ella?”, indicaba en 1965 el autor de Coronación.

Cinco años antes de publicar el Obsceno Pájaro de la Noche, Donoso confiesa incluso estar “desesperado” y con “ganas de separarme, de irme a alguna parte donde no haya responsabilidad por mi tiempo, de nada, de nadie, donde no oiga la máquina, donde no la oiga a ella -estoy desesperado por un blow-off salvaje. Eso es lo que me tiene la úlcera en tan mal estado. Es lo que me hace odiar y detestarlo todo, esta casa, M. Pilar, mis suegros, mi literatura, mi trabajo, mis amigos -todo, absolutamente todo”.

En una carta dirigida a María Pilar del 30 de agosto de 1960, Donoso señala en tanto que “una tarde estaba yo en casa de un amigo que siempre sospeché de ser homosexual, sin haberlo confirmado. Llegó entonces el ex marido de una prima mía, un muchacho muy buenmozo, y pude advertir que había algo entre ellos, algo que era amor. Me conmoví hasta los huesos, me dio una envidia, una desesperación, unas ganas de tener exactamente lo que esos dos tenían -y sin embargo, un deseo vehemente de no ser como ellos… Es esa envidia lo que está en la base de todos mis problemas, gorda. ¿De dónde viene, por qué es, qué significa? ¿Hasta dónde puede llegar a destruir nuestra vida, esa envidia mía por una situación homosexual?”.

Puntualiza que “la tentación es inmensa, terrible, pero resulta que eso (asumir una vida homosexual) me produciría tanto o más dolor que el no hacerlo. Mi neuroris es debida, ahora, a esa sensación de estar viviendo sobre arena movediza”.

Junto a aspectos de su vida privada los Papeles de José Donoso en la Universidad de Iowa, incluyen su correspondencia con escritores como Carlos Fuentes y Mario Vargas Llosa en los inicios del boom latinoamericano, con autores nacionales como Nicanor Parra, Enrique Lafourcade y Carlos Droguett y también con su esposa, textos que sin duda contribuirán como ningún otro documentos a conocer la verdadera biografía del escritor fallecido el 7 de diciembre de 1995 en Santiago.