Existen presiones para que permanezca expulsada
Por C.H y A.R
22 de junio, 2004 (OpusGay).- Feliz y nerviosa está la estudiante Gabriela M porque mañana será reincorporada al Centro Politécnico de San Ramón tras permanecer una semana y media apartada de clases debido a su orientación homosexual.
“Estoy muy entusiasmada porque podré volver a clases, ver a mis compañeras y, lo más importante, terminar mi cuarto medio”, señaló a OpusGay la estudiante de contabilidad tras enterarse que el Ministerio de Educación (Mineduc) intervino en su favor ante el Colegio tras una petición cursada ayer por el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh).
El Mineduc comenzó esta mañana los diálogos con la directora del Centro Politécnico, Irene Claramun, quien aunque se comprometió a reincorporar a la estudiante y reconoció que había sido expulsada por ser lesbiana, negó que la medida fuera de su responsabilidad.
“La expulsión la determinó el inspector Edgardo González, sin avisarla a la dirección”, señaló Claramun al Mineduc según informaciones recopiladas por OpusGay, las cuales también indican que diversos profesores del Centro Politécnico han llamado al Ministerio sin identificarse para rechazar la incorporación de la alumna.
Tales antecedentes mantienen muy inquiera a Gabriela “por que no sé que va a pasar en el Colegio. Yo creo que don Edgardo no se va a quedar así, aunque él con la orientadora del colegio me han dicho que sólo reciben instrucciones de la dirección y que no tienen nada personal contra mí”.
La afectada, sin embargo, está convencida que “seré muy bien recibida por mis compañeras. Todas sabemos que han echado a varias por ser lesbianas”.
Uno de los casos afectó precisamente a la pareja de Gabriela, Natalia, quien hace dos años no pudo matricularse en segundo año medio luego de hacerse público en el colegio su lesbianismo.
“Nunca quise tomar represalias ni nada por estilo porque en ese momento mi familia no sabía de mi condición y preferí ocultarla por lo mismo”, recuerda Natalia.
Aclara, sin embargo, que en la actualidad la relación “con mi familia es súper buena. Cuando salió a la prensa la expulsión de la Gabi, mi mamá hasta me dijo que podía ser apoderado de ella”.
ORIGEN DEL CONFLICTO
El año pasado Gabriela comentó a todo su curso en una clase de orientación que era lesbiana y desde ese momento, según comenta, la dirección del colegio hizo evidente su malestar por su permanencia en el establecimiento.
La situación se agudizó el pasado 14 de julio, cuando el inspector general Edgardo González la descubrió de la mano con Natalia a cuadras del colegio, lo cual desencadenó más tarde su expulsión.
El mismo día Gabriela fue a estampar la denuncia al Ministerio de Educación, siendo derivada a la dirección provincial de esa cartera. “Ahí dijeron que me llamarían, pero nunca lo hicieron. Sólo tuve éxito cuando intervino el Movilh, sino esto no hubiera sido posible” , comenta.
En efecto, el Movilh y Gabriela se reunieron ayer con diversos funcionarios del Mineduc, entre esos el ministro Sergio Bitar, demando la incorporación inmediata de la estudiante a clases.
“Estamos muy satisfechos porque conseguimos con Gabriela en tiempo récord un triunfo emblemático. Sin embargo, desde ahora nos preocuparemos de que la alumna no sea agredida o violentada en el Colegio por sus directivos”, puntualizó el presidente del Movilh, Rolando Jiménez.
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