Castell, Passalaqcua, Illanes, Simonetti y Cáceres fueron sus blancos

9 de enero, 2004 (OpusGay).- Utilizando un lenguaje ácido, despiadado e irónico el escritor Pedro Lemebel se fue en picada contra diversos personajes públicos de los ámbitos de la cultura y el espectáculo que en los últimos años han salido del closet en Chile.

Aunque no da los nombres, el autor de “Tengo Medio Torero” hace clara referencia en su última columna publicada por The Clinic al fotógrafo Jordi Castell (“macho coligue”), a los escritores Pablo Illanes (“bruta”) y Pablo Simonetti (“gay man”), al periodista Italo Passalaqcua (“homocashual”) y el estilista Gonzalo Cáceres (“carabela navideña”).

Bajo el título “Las locas sin drama del verano neoliberal”, Lemebel critica en esas personas la ausencia de un reconocimiento público sobre la importancia que ha tenido la lucha del movimiento homosexual en sus respectivas salidas del closet. Centrado en esa opinión, los destroza uno a uno.

Sobre la presencia de Passalaqcua en la televisión indica “allí aparece, bajo un reflector verde papagayo, la luna calva del comentarista, periodista, malabarista de la estética coliche, vociferando educadamente que no soporta a los afeminados, que él se asume como católico, catequista y homocashual con suelo de goma”.

La prensa también da espacio, agrega Lemebel, a Illanes “conocido por su libro de éxito: UNA NIÑA BRUTAL, en realidad sobre todo bruta cuando declara que él (él con h) no le debe nada al mundo gay militante, en realidad (aleteando las pestañas) él es más actual, cómo te digo más normal, un hombre que ama a otro hombre, ¿te fijas?, zas”.

En referencia al escritor Pablo Simonetti sostiene que “es del tipo gay man, o tipo macho guapo, con unos ralos pelos de zorra en la barba dice ronco y paltón, que el tema del año es EL DESTAPE GAY (aplausos), conseguido con unos amigos de té canasta que lucharon por la libertad en un depto, con linda vista a Vitacura”.

Los calificativos contra Castell continúan en la columna. Es “un fotógrafo top, asesor de imagen, opinarista, artista y joven macho coligue, de polerita apretada, tostado Cancún, musculatura de gimnasio y cintura de mosca. Él, con refinado hablar, da algunas opiniones culturales, políticas y sexuales, que hacen enrojecer al resto “.

De su fauna de las “locas sin drama”, Lemebel dejó para el final a la “guinda de la torta” : Gonzalo Cáceres . “Más bien es el zapallo pascuero de la noche: mezcla de carabela navideña, piñata de Patronato o ekeco boliviano de compra en un mall. Es la guatona esteticista que repite sabrosamente (con deleite) el testimonio de su violación de niño”.

“Pero ya es mucho”, puntualiza Lemebel, “no hay paciencia que soporte tanta mugre. Es probable que este muestrario de zoo gay, sea la parrilla visible que más acomode al proyecto tolerancia país. También es posible que el viejo estigma sodomita se haya normalizado, desexualizándose (sin deseo) en la fiesta eunuca de la chunga fivolité. Por eso (…) pienso en locas históricas, en las presentes y ausentes, en muchas, pero que no son tantas, aquellas que a fuerza de discursos y callejeras marchas posibilitaron la apertura del tema en este intolerante país”.