CONSIDERAN “CATASTROFICA” RENUNCIA DE GAY A OBISPADO

Denuncian fuertes presiones al interior de la Iglesia Anglicana

8 de julio, 2003 (OpusGay).- Como una “catástrofe” al interior de la Iglesia Anglicana calificaron hoy diversos circuitos religiosos la renuncia del sacerdote Jeffrey John a tomar posesión como el primer obispo homosexual del mundo.

El reverendo Colin Slee dijo que la renuncia de John para encabezar la diócesis de Reading (oeste de Londres) se debe a presiones de los sectores ultraconservadores de la Iglesia del Reino Unido, pues “él me prometió que no dimitiría en forma voluntaria. Lo sucedido supone una catástrofe para el anglicanismo”

A juicio de Slee, deán Southwark, la “homofobia” de los anglicanos es ” un mal mensaje no sólo para los homosexuales, sino para mucha gente heterosexual, abierta e inteligente”.

En una carta redactada por John y conocida este jueves, el sacerdote gay explicó que renunció a su nombramiento como obispo el próximo 9 de octubre para evitar un “daño” o un “quiebre” en la unidad de la Iglesia anglicana.

La dimisión podría producir, sin embargo, precisamente el efecto contrario, pues

Mientras Slee anuncia una catástrofe, las posiciones entre los religiosos “liberales” y conservadores” se han agudizado tras la renuncia, según las agencias internacionales.

El nombramiento de Jeffrey John, conocido meses atrás, generó serias polémicas debido a que el sacerdote reconoció públicamente su orientación homosexual y comentó que había tenido una relación con un hombre durante 27 años, pero manteniéndose célibe en la actualidad.

El obispado de John contaba con el apoyo implícito del arzobispo de Canterbury, Rowan Willian, pero una carta firmada por nueve altos representantes del anglicanismo en el mundo y unos 80 sacerdotes habían expresado su público rechazo.

El arzobispo de la Iglesia de Nigeria, Peter Akinola, llegó incluso a amenazar con retirarse del anglicanismo junto a sus 17.5 millones de fieles si se soportaban “los ataques de Satán”, personificados en el nombramiento de John.

“Definitivamente no concordamos con esos nombramientos y tenemos el deber de oponernos”, había advertido por su parte el arzobispo de Uganda, Livonstone Nkoyoyo.