Kirchner declaró ser favorable a las uniones de hecho y al cambio de nombre de travestis
Por Catalina Herrera.
28 de abril 2003 (Opusgay).- Junto al ex presidente Carlos Menem pasó a segunda vuelta el justicialista Néstor Kirchner, candidato que está a favor de promover importantes derechos en beneficio de las minorías sexuales argentinas, según aclaró él mismo en consultas efectuadas por el movimiento homosexual.
Kirchner, quien para los analistas representa la continuidad de las principales políticas del actual mandatario, Eduardo Duhalde, se enfrentará a Menem luego que los argentinos le dieran ayer el segundo lugar en las elecciones presidenciales con el 21.99 por ciento de los votos, 2.35 por ciento menos que su rival. En la Provincia de Buenos Aires Kirchner obtuvo, sin embargo, el 25 por ciento de los votos, cinco puntos más que Menem.
En una consulta efectuada este mes por la Comunidad Homosexual Argentina, Kirchner se manifestó a favor de legalizar las uniones entre personas del mismo sexo en todo el país. También señaló estar dispuesto a garantizar en la Ley Nacional la no discriminación contra ese grupo, otorgar pensiones de fallecimientos y herencias a las parejas del mismo sexo, eliminar una resolución del Ministerio de Salud que prohíbe a los gays, lesbianas y travestis donar sangre y reconocer el cambio de sexo a las personas transgéneros en su documentación.
El candidato estaría incluso dispuesto a promover la libertad de conciencia en los legisladores de su partido y solicitaría a los mismos dar quórum para el tratamiento de los derechos homosexuales.
Kirchner, a diferencia de otros ocho candidatos que ya no pasaron a segunda vuelta, sólo rechazó la propuesta de la Cha de desarrollar una campaña de VIH/SIDA focalizada hacia la población homosexual.
Hasta la fecha el abanderado contaría con el apoyo de la gran mayoría de los homosexuales argentinos, pues en encuestas efectuadas por la Cha y el medio SentidoG, sólo un 5 por ciento de las minorías sexuales lo considera como “el peor candidato”.
Menem, también justicialista, es rechazado por el 42 por ciento, cifra que podría llegar al 95 por ciento si se considera que las encuestas sobre la materia se efectuaron cuando estaban en competencia los 10 candidatos.