Francis Francoise

Por Félix Santana

Por estos días Mauricio Zenteno, uno de los transformistas más conocidos de Chile que anima espectáculos en diversas discoteques gays capitalinas bajo el nombre de Francis Francoise, reparte su tiempo entre sus habituales ensayos, la recuperación de una rebelde lesión en la rodilla y su desempeño teatral como una prostituta vieja en una obra de Tennessee Williams con la cual el director Vicente Ruiz volverá a las tablas capitalinas.

“Me entusiasma la idea de hablar en la obra de un tema social como es la vejez. De cuando a una persona mayor la corretean de todos lados, incluso en la prostitución“, señala el artista que en octubre próximo cumplirá 21 años de trayectoria.

Zenteno aclara que su interés por actuar en cine y en teatro comenzó como una “apuesta”, en especial luego de su presencia en Coronación, del reconocido director Silvio Caiozzi.

“Me di cuenta que tenía condiciones. Lo que la Francis es hoy, es gracias al reconocimiento de la gente. No pido al público aplausos, ni a los dueños de los locales que me paguen más que a los demás. Ellos gratifican mi trabajo y la gente aplaude mi talento“, dice.

A pesar de todos los éxitos, el artista lamenta que en ocasiones Francis Francoise sea para algunas personas más importante que Mauricio Zenteno, pues ello “anula” al ser humano real.

¿Francis es totalmente diferente a Mauricio?

Sí. La Francis es la que da el dinero con que se paga el arriendo, la luz, el cable y el teléfono. Mauricio es la persona tímida que recibe la plata y paga.

¿Esto es como un matrimonio?

Sí, pero la Francis se sube por el chorro, porque anula un poco a Mauricio. Todo el mundo dice “ah, la Francis”. Te invitan por ser la Francoise, no por ser Mauricio. A veces voy vestido de hombre y dicen “ahí va la Francoise”. Me gustaría que dijeran “Mauricio te invitamos a ti a un cumpleaños”..

¿Eso te molesta un poco?

Claro y eso se lo podría criticar a mucha gente. Hay una diferencia entre el artista y la persona. No me gusta que me digan Francis cuando estoy sin peluca y sin pintura.

Que la Francis sea más conocida que Mauricio, ¿también tiene su lado bueno?

Mantenerse y ser considerado uno de los mejores es difícil. Hay gente que aparece y desaparece, pero yo siempre he estado vigente. No hay un fin de semana cuando no haga un show. Eso habla bien de mi trabajo, de mi constancia y que estoy dejando una huella. Estoy recibiendo energía del público y si es con aplausos uno se siente súper estimulado.

¿Qué opinión tienes del resto de los transformistas?

Hay muy buenos talentos en general. Siempre digo que somos animales en extinción. Me gustaría tener una escuela de talentos para transformistas, porque sé que tendría más de un alumno, y tener un local propio. Hacer show cuando quiera hacerlo, pagarle bien a la gente.

Y la Francis Francoise, ¿No piensa jubilar?

“Ella en un escenario, su vida se quedará”, dice una canción. No sé si va a jubilar, pero la gente no la deja ir. Esa es la verdad. De repente, ella misma está cansada, averiada; pero es porfiada, se para igual y va a trabajar.

Además, Mauricio no podría vivir sin Francis…

Así es. No pueden separarse…este es un matrimonio indisoluble.