Demandó resolución pro minorías
Por C.H
15 de abril, 2005 (OpusGay).- En un encendido discurso ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, la Comunidad Homosexual Argentina (Cha) denunció ayer los graves casos de discriminación por orientación sexual en el mundo y acusó que la falta de pronunciamiento sobre la materia, vuelve a las Naciones Unidas en cómplice de los atropellos.
La intervención, enmarcada en el 61 período de sesiones de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, sostuvo que a los homosexuales “se nos obliga a esconder nuestra identidad, a vivir en el silencio, a pedir refugio y nos someten al temor, el insulto, la persecución, la invisibilidad y hasta la muerte. Miles de personas son asesinadas por su orientación sexual e identidad de género.”.
Representada por su activista Pedro Paradiso, la Cha agregó en Ginebra que la tardanza de la ONU para enfrentar la homofobia “termina siendo cómplice de las matanzas extrajudiciales, desapariciones, detenciones arbitrarias, torturas y la aplicación de pena de muerte”.
Igualmente demandó la aprobación rápida de una resolución que garantice la no discriminación por orientación sexual, trámite que viene siendo postergado desde el 2003, pese a la activa movilización de organizaciones de minorías sexuales en todo el mundo.
A continuación se reproduce el texto íntegro de la Cha:
“Señor Presidente, distinguidos miembros de la Comisión de Derechos Humanos
Como miembro de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y activista de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) y de la Asociación Internacional de Gays y Lesbianas (ILGA), vengo a denunciar la violación a los derechos humanos que vivimos por nuestra orientación sexual e identidad de genero.
Ser gay, lesbiana, travesti, bisexual, transexual, intersexual significa en muchos paises del mundo sufrir la discriminación y la exclusión. Se nos niega el acceso a la justicia, el derecho a la salud, la vida, la vivienda, la educación y el trabajo. Se nos obliga a esconder nuestra identidad, a vivir en el silencio, a pedir refugio y nos someten al temor, el insulto, la persecución, la invisibilidad y hasta la muerte. Miles de personas son asesinadas por su orientación sexual e identidad de género.
Los derechos humanos son universales e indivisibles y no resulta suficiente la lucha por la protección de los derechos humanos de solo una parte de nuestra identidad, como el sexo o la religión, mientras se niega la protección de otra parte de nuestra identidad. La orientación sexual e identidad de género son parte de nuestra identidad, como la raza, el género o la religión.
Esta Comisión de Derechos Humanos debe afirmar y garantizar el principio de universalidad de la orientación sexual e identidad de género. Que finalmente y de una vez por todas reconozca y condene los terribles abusos de derechos humanos hacia nosotros y nosotras, lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros de todo el mundo. La tardanza de esta Comisión termina siendo cómplice de las matanzas extrajudiciales, desapariciones, detenciones arbitrarias, torturas y la aplicación de pena de muerte.
El necesario y urgente reconocimiento de los derechos de nuestra comunidad por esta Comisión de Derechos Humanos será, entonces, lo que debe ser: un grito de alerta, un NUNCA MAS y un postergado reconocimiento de los valores universales: la igualdad ante la justicia en contra del trato desigual y excluyente entre los seres humanos.
La aprobación de una resolución será el pronunciamiento de ustedes para que los pueblos del mundo se comprometan en la construcción de sociedades más justas e igualitarias, donde se puedan desterrar los odios irracionales y las justificaciones segregacionistas basadas en la persecución de la diferencia y el no respeto de la diversidad humana.
Es fundamental conformar una cultura para la paz y una educación mundial orientada al reconocimiento y el respeto de las diferencias, la pluralidad y la vida democrática de todas las naciones del mundo. La lucha en contra de la opresión no puede llevarse adelante separada de la lucha de muchas otras opresiones.
Ustedes, los que integran esta Comisión de Derechos Humanos tienen la oportunidad, el poder, y porqué no decirlo, la obligación, de garantizar los derechos humanos de todas y todos.
Estamos atrasados en siglos, ya es tiempo, distinguidos miembros de la Comisión de Derechos Humanos. Millones de personas en el mundo estamos esperando este acto de justicia. En la historia de la humanidad el silencio siempre ha sido cómplice e impune. De ustedes depende.
No hay religiones, ni fundamentalismos, no hay doctrinas, no hay políticas, que puedan sostener la verguenza de la desigualdad de las personas a causa de la orientación sexual e identidad de genero.
Argentina apoya el reconocimiento y la protección de los derechos humanos de todas las personas, respetando la orientación sexual e identidad de género. Nuestro Presidente, Néstor Kirchner, ha manifestado públicamente su apoyo a que las Naciones Unidas apruebe una resolución en este sentido. Esperamos que ustedes también lo hagan.
Mi ultima frase, la consigna de la Comunidad Homosexual Argentina: “En el origen de nuestra lucha está el deseo de todas las libertades”.