1.- Es de suma urgencia que los establecimientos educacionales y las familias discutan con sinceridad y sin prejuicios con sus alumnos/as y/o hijos/as sobre el carácter diverso de la sexualidad, asumiendo que existen variadas orientaciones sexuales; homosexuales, bisexuales o heterosexuales; ninguna de las cuales son condenables, inmorales o antinaturales.
2.- El desconocimiento y/o no abordaje sobre estas temáticas lleva a los jóvenes que van descubriendo su homosexualidad o bisexualidad a buscar información, compañía y amor en personas, espacios y/o lugares ajenos, extraños, no apropiados y, en el peor de los casos abusivos y peligrosos para su propia integridad y estabilidad emocional o psíquica. Esta situación se agudiza si el joven aprecia que su entorno más cercano condena o repudia su orientación sexual.
3.- Las relaciones sexuales consentidas deben darse en un contexto donde los más jóvenes tengan el mejor y mayor conocimiento sobre su propia orientación sexual, de manera de erradicar cualquier posibilidad de que se vean enfrentados a abusos o a relaciones desiguales de poder, aspecto que puede ocurrir en algunos casos cuando las diferencias etarias son grandes entre las parejas.
4.- Apoyamos y respaldamos desde todo punto de vista la aplicación de reglas igualitarias para cada alumno/a en los establecimientos educacionales, sin discriminación de ningún tipo.
5.- Condenamos que una persona, cualquiera sea su edad u orientación sexual, ingrese a un establecimiento educacional sin ningún tipo de autorización y que, más repudiable aún, lo haga para tener relaciones sexuales, por más que estas sean consentidas.
6.- Recordamos que en Chile las relaciones sexuales consentidas entre heterosexuales o lesbianas que involucren a mayores de 14 años no son un delito en Chile. En cambio en el caso de relaciones sexuales consentidas entre gays, existe una clara desigualdad y discriminación, pues el artículo 365 del Código Penal sólo las considera legales a partir de los 18 años, aspecto que el propio Comité de los Derechos Humanos del Niño de la ONU ha llamado a nuestro Estado a corregir.
En ese sentido, es urgente reconocer que cualquier aplicación de esta norma es discriminatoria y abusiva.
7.- En el caso específico de los hechos ocurridos en el Instituto Nacional expresamos:
a.- En primerísimo lugar toda nuestra solidaridad al joven de 14 años debido a la difícil situación que debe estar padeciendo, toda vez que su relación sexual homosexual consentida ha sido visibilizada de la manera menos oportuna y apropiada para su estabilidad emocional: seis de sus compañeros lo fotografiaron y grabaron y el caso trascendió a los medios de comunicación.
Este panorama nos entristece profundamente, por tanto rechazamos y repudiamos con la máxima fuerza cualquier satanización, estigmatización, burla o humillaciones que pueda padecer el joven a raíz de lo sucedido, al tiempo que le hacemos saber que cuenta con toda nuestra compañía. Es principalmente por él y su estabilidad que emitimos este comunicado.
b.- Rechazamos cualquier trato discriminatorio que pueda padecer el joven en razón de su orientación o conducta sexual, por tanto, exigimos que el abordaje de esta materia que haga el Instituto Nacional se realice en un contexto libre de toda discriminación y prejuicios, brindando un trato igual al que otorgarían si estuviesen en presencia de relaciones heterosexuales.
c.- Instamos al Instituto Nacional a aclarar públicamente de qué manera aborda la homosexualidad y la transexualidad en sus clases y a decir que tipo de acompañamiento, orientación o apoyo ha brindado al joven y la familia para comprender sobre las orientaciones sexuales y lo sucedido. En caso de nada haber hecho al respecto, lo que sería grave, instamos al Instituto Nacional a interiorizarse sobre estas materias y a educar en la diversidad sexual con urgencia.
d.- Instamos al Instituto Nacional a explicar a sus alumnos, y especial a los jóvenes que tomaron las fotografías del menor involucrado en estos hechos, que las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo son naturales y que la condena pasa más bien por la realización de actos de tipo, u heterosexuales, cuando constituyen abusos y no son consentidos.
e.- Instamos, por último, a la Municipalidad de Santiago, a implementar y promover políticas de educación sexual en los colegios de la comuna, en alianza con el Mineduc.